lunes, 26 de febrero de 2007

Viaje al Centro del Imperio


Un poco preocupado y en cierta manera, tomando precauciones por lo acontecido a este espacio, viajaré a ver algunos amigos en el Centro del Imperio.
Ya saben que este blog, así como otros, ha sido destinatario de una rama facciosa mal llamada asimisma "parte del Powerrangerismo militante" y autodeterminada con el falaz epíteto de "Auténtica". Sus integrantes han lanzado una ofensiva sin miramientos que no contempla ningún tipo de código ni moral de combate.
Mi blog ha sido amenzado por Uacho & Pepino con quienes otrora supe compartir los caminos de la militancia y quienes, tomando en su derecho otros caminos, han optado por romper lanzas con el pasado que los cobijó.
Heme aquí en la obligación de tomar los recaudos necesesarios para defender los espacios que la voluntad nacional y popular conquistó ya no como era su costumbre, por consensos con el gorilismo acovachado en su guarida asquerosa, sino por la lucha y el sudor de su gente que con su mandato en las organizaciones virtuales populares, conquistó -sea este acaso el derecho de soberanía política de los pueblos- (y la primera de nuestras tres banderas) los territorios que por derecho le conciernen.
Compañeros y simpatizantes del movimiento powerranger : estaré afuera hasta el 5 de marzo, no me extrañen, mandaré fruta, como es mi costumbre.
Un adelanto: a mi regreso mudaremos este blog a otro espacio que habrá de llamarse "El Colectivo Mich", hasta entonces, pergeñaré la resistencia en el exterior.
Muchas Gracias

Mich,
Vice Comandante de las Fuerzas Virtuales Powerranger

viernes, 23 de febrero de 2007

El cielo está de joda, pero te extraño Carposaurio…

Hace años ya, le hice escuchar un par de temas a mi amigo el Negroshot del último disco de Pappo, y su conclusión –digna del Negro- fue: “El Carpo es como los buenos vino, añeja bien…”. Y en ese momento estabas con nosotros, no podíamos evitar reírnos viéndote hacer boludeces en la propaganda de brama, o recordándote en el escenario. Si hubieras tocado un cachito menos, por ahí …

Estoy nadando en un río maravilloso a las 9 de la noche, con luna llena y gigantesca asomando en la otra orilla y una banda de rock tocando en vivo en un bar en la playa. El cantante dice “… dedicado a la memoria de Norberto Napolitano” y empieza a tocar “Juntos a la par”. Todo bien, soy feliz con la puntada en el pecho incluida.

Me duele que te hayas ido Carpo.

A La Paternal que tanto quiero, dios le robó a su demonio.

miércoles, 21 de febrero de 2007

Reflexión intrascendente. Toma 1


A veces “me suceden” estas cogitaciones…, sepan disculpar los lectores de este blog.
Línea de colectivo 29 yendo hacia Barrancas de Belgrano, suben dos viejos.No voy a ahondar en el estado de fragilidad de ambos, pero tengamos en cuenta que los viejitos estaban delicados. El colectivo cargaba poca gente en ese momento pero todos sus asientos a la vez estaban ocupados. Yo estaba sentado hacia el fondo en la ventana portando un enorme bolso y escuchando música cuando detecto que la persona sentada adelante mío que daba hacia el pasillo –una señora- le da el asiento a la viejita. Nadie cedía su lugar de los ahí sentados exactamente delante del viejito, motivo por el cual le hice una seña al hombre descargué el bolso y le ofrecí el asiento, el cual aceptó gustoso.

Una vez parado reflexioné acerca de la cantidad de metros que estos viejos tuvieron que caminar en el colectivo en condiciones de alta dificultad para que alguien les de el asiento; también deparé en la cantidad de personas de diferentes géneros y franjas etáreas que declinaron la posibilidad de ceder su lugar.

No recuerdo quién fue el autor de un concepto que me parece interesante, (creo que fue Norbert Elías en “El Proceso de la Civilización” -no estoy seguro), que equiparaba la etiqueta, las convenciones sociales, las normas de civilización y determinados códigos de lenguaje, a la mercancía de cambio. O sea, un capital cultural que también se canjea. Claro que -de ser así- los viejos no tenían en ese contexto capital de cambio.
En la situación intervienen varias convenciones acerca de normas y etiqueta de conducta: son los “caballeros” los que ceden el asiento a las “señoras mayores”, “embarazadas” (en donde sería la “gordura” un indicador concluyente aunque no siempre veraz), a los “viejos” en estado de decrepitud, etc. Los mismos sujetos serían beneficiarios de este política de etiqueta para otros casos y contextos tales como “lugar privilegiado en la fila” y otros tantos y tantos y tantos que involucran una política de conducta.
Los contextos histórico-culturales que dieron origen a dichas convenciones están seguramente perimidos, obsoletos, acabados, vaciados de sentido.
Sin embargo a los viejitos en el colectivo SÍ había que darles el asiento. El problema es: ¿las razones por las cuales sí hay que dar en ese caso el asiento, habrán de ser individuales o colectivas?

viernes, 16 de febrero de 2007

Deeeele, sea bueeena...


Qué le cuesta un último pedido!!!
Pero cómo quiere que haga, eso es cosa de otra administración!
Pero usted tiene influencias, usted los conoce...
Bueno sí... pero no me puedo meter en esas cosas, imagínese me matan!
No diga pavadas, cómo la van a matar!
No me provoque que con la hoz le rebano las pelotas!
Mire... si me hace ese favor, le regalo un martillito que le combina justito...
No se moleste! tengo uno que me regaló el mismísimo Vladimir Illich el día que lo conocí...
No se enooje doña... yo lo único que quiero es que cuando me vaya con usted me dejen en paz...
No se haga ilusiones...
Sí, ya sé... pasa que le tengo miedo a mi suegra y sus amigos con todos esos rezos que hacen
Bueno, no se queje no es para tanto, ellos lo hacen por su bien
NOOOOO!!!! Ellos rezan por el bien de la gente y mientras tanto los liquidan a todos... Llevan siglos de práctica... Mire si el destino de mi espíritu queda esclavizado a las palabras de ese grupo que pretende atar y guiar los derroteros de las almas... se lo suplico, lléveme al Hades... quiero ir con Perséfone!!!!
No se lo puedo garantizar...
No quiero que recen por mí... esta gente hace todo para el orto, por ahí rezan por vos y te esclavizan en el tiempo, en un eterno Tanatos sin forma ni piedad...
Bueno viejo, jódase... quien lo manda a tener esas amistades!
Son mis suegros, no mis amigos!!!!
Lo mismo!!, ajo y agua!!! Lo mío es un trabajo técnico... y no puedo andar protegiéndolo de esa gente... Se hubiera avivado antes.

domingo, 11 de febrero de 2007

Tengo una duda 1


Situación: si estando bajo un puente ferroviario el tren pasa en ese momento "encima nuestro", entonces podríamos pedir tres deseos.
Considerando que: viajamos en un colectivo que queda detenido debajo de un puente ferroviario en el momento en el cual un tren pasa y nos percatamos de que una parte del transporte está debajo del puente, y la parte en la que viajamos nosotros queda fuera de la perpendicular trazada entre el borde exterior de dicho puente y la calle.
Duda: ¿corresponde pedir los tres deseos?